lunes, 24 de enero de 2011

Otra vida.


Ya no quiero estar en la cultura de errar pero es inevitable, es mi andar; es esencia que no soy capaz de cambiar. Otra vida quiero jugar, pero todo vuelve a empezar y los recuerdos, las vivencias, todo se clava otra vez en mi mente; sin embargo se que todo empieza y finaliza con revoluciones. El escenario cada vez es más heavy y los personajes van variando, dejando rastros (sin dudas) de su diálogo y sus acciones, pero al fin y al cabo desaparecen, dándole entrada a los otros personajes.