jueves, 17 de junio de 2010

~Un miedo de cama~ (10:51 AM)


Despiertos o dormidos, con frío o con calor; la amamos igual; cama. ¿Será porque es testigo de cada sueño y pesadilla que tenemos? ¿Será porque el solo hecho de "descansar" sobre ella nos hace bien? Nos escuchan las almohadas, nos contienen las sábanas, nos entiende el colchón, nos aguanta. ¿Porqué será que cuando tenemos mucho miedo no importa si es real o no, nos tapamos hasta la cabeza con las sábanas? Como si eso puediera lograr alejar el miedo o la cosa, persona, o lo que fuere que nos ataca... Sin embargo lo hacemos, ¿acto reflejo? Cada vez que sentimos miedo y estamos tapados. ¿Nos sentimos más protegidos? ¿Más cobijados? Será porque simplemente las sábanas dan la división de la realidad y la fantasía... todo lo que pasa fuera de ellas puede ser real, puede que asuste, puede que entristece, puede que nos alegre incluso pero está fuera de ellas y nada más importa; porque estando dentro nada nos puede pasar... bueno eso es lo que creemos. Será porque dentro de ellas pasa todo lo fantasioso, los sueños en los que; gritamos, lloramos, movemos las piernas ante la sensación de estar cayendo, reímos... vivimos nuestra fantasía, nuestros sueños dentro de ella... Al destapar la realidad y al cubrirnos, la fantasía; pero siempre pensando que ahí estaremos más calmos o más protegidos. Por algo la cama es uno de los mejores lugares para llorar y desahogarse abrazando tu almohada, para quedarnos dormidos y dejar de llorar; apagar el llanto en nuevo sueño. ¿Qué sabe que nos depara? Todos los sueños son distintos y extravagantes, la mayoría de las veces nada tiene que ver con nada; solo están ahí al fondo de tu mente esperando que los encuentres. Levantarnos y salir de lo que estábamos soñando; díficil tarea, ¿no?. Nos mantenemos al contacto del sueño hasta despertarnos del todo y salir nuevamente destapados de las sábanas, a la realidad.
(Fotos Googleadas)